La leche materna es el mejor alimento que podemos ofrecer al lactante durante los primeros meses de vida. Son múltiples los beneficios que aporta, tanto al recién nacido como a la reciente madre. Proporciona los nutrientes necesarios para el correcto crecimiento y desarrollo intelectual del bebé, ayuda a establecer vínculos afectivos madre-hijo, reduce el riesgo de sufrir varias enfermedades, etc.

Si eres madre primeriza es normal que te puedan surgir algunas dudas al respecto como, ¿tendré suficiente leche? ¿mi leche será de calidad? ¿y si me salen grietas? ¿y si no puedo dar el pecho? En la Farmacia Colldeforn te pueden ayudar y asesorar durante este periodo tan especial.

La composición de la leche materna se adapta a las necesidades del lactante y varía a lo largo de la lactancia, a lo largo del día, e incluso, en el transcurso de cada toma.

Desde el primer momento fluye una leche amarillenta y espesa denominada calostro, rica en proteínas, vitaminas, minerales e inmunoglobulinas. Este es el alimento ideal para los primeros días del bebé, puesto que su estómago es pequeño y necesita realizar tomas frecuentes de poca cantidad. Más adelante va saliendo la leche madura, que al principio de la toma es más aguada y rica en azúcares y hacia el final más densa y rica en grasa.

Como tener éxito con la lactancia materna?

La lactancia materna no siempre es fácil, es un proceso de aprendizaje para la madre y el bebé. Desde la Farmacia Colldeforn te damos una serie de consejos para que tu bebé y tú podáis disfrutar de esta etapa:

  • En el momento del nacimiento es muy importante ofrecer el pecho al neonato tan pronto como sea posible, y establecer así, un contacto directo de piel con piel.
  • Es recomendable dar el pecho a demanda y no estar pendientes del tiempo ni de la cantidad, el cuerpo de la madre adapta la producción a las necesidades del bebé. Cada toma tiene que durar hasta que el lactante deje el pecho espontáneamente, y no es necesario que mame de los dos pechos, sino que vacíe bien al menos uno cada vez.
  • Dar el pecho, al principio, puede ser un poco molesto pero nunca tiene que hacer daño. Si sientes dolor tendrás que corregir, todas las veces que sean necesarias, la posición de succión del bebé comprobando que su boca coge todo el pezón y parte de la aureola.
  • Intenta buscar un lugar tranquilo donde el bebé y tú estéis cómodos y tengáis un contacto estrecho.
  • Puedes aplicar un disco térmico en caliente para estimular el flujo de leche. Al acabar lo puedes aplicar en frío para disminuir la inflamación del pecho.
  • Para conseguir una buena producción de leche, intenta seguir una dieta sana y equilibrada, y bebe mucha agua.

Si después de seguir estos consejos, el bebé no succiona correctamente, te aparecen grietas, produces más leche de la que toma el lactante, existen complementos como las pezoneras, la crema protectora del pezón, los extractores, etc, que pueden ayudarte a hacer más fácil la lactancia.

Y si aún así no puedes dar el pecho, no sufras, existen en el mercado leches de fórmula de gran calidad que te permitirán alimentar a tu bebé sin problemas. Para cualquier otra consulta, en la farmacia disponemos de especialistas que resolverán todas tus dudas.